Aurora (Protagonista de "El juego de la verdad") nos presenta a Mireia Giménez Higón

Aurora (Protagonista de "El juego de la verdad") nos presenta a Mireia Giménez Higón

Mi nombre es Aurora y para conocer mi historia primero debo contar la de mi creadora, ¿os suena? Así empieza la novela que narro gracias a la imaginación de Mireia Giménez Higon, ella fue quien me creó e hiló los acontacimientos que inundaron El juego de la verdad. Pero no sólo ha escrito esa novela, será mejor que comience por el principio.

Mireia es una mujer de 34 años, madre y esposa, lleva trabajando en el Ministerio de defensa desde que la conozco, y ya llevaba tiempo. Además, estudió la carrera de Turismo y sigue estudiando Historia y Geografía, pero muy poquito a poco porque la vida no le da para más cosas. Nunca deja de sacarse títulos pequeños como Quiromasaje I o Corrector editorial, que ya me diréis que tendrá que ver una cosa con la otra, pero ella sabrá.

Total, en el terreno literario comenzó escribiendo relatos y enviandolos a diferentes certámenes, quedando siempre en los primeros puestos y publicándose en las diferentes antologías. En uno de ellos consiguió hacerse con el podium y ganar el primer premio, el cual consistía en la publicación de una novela. Ahí nací yo y toda mi historia, claro que, en un principio, yo no iba a existir pero... terminé siendo el toque paranormal de la novela ¿Por qué será...? Sin embargo, curiosamente, Mireia escribe sobre todo ficción histórica y leyendas al estilo Bécquer, o eso quisera ella porque ahora mismo cuenta con una novela ambientada en el levantamiento de Madrid de 1808 del cual está muy pero que muy orgullosa pues ¡hasta se vende en dos de los museos militares más importantes de España! Yo no sé vosotros, pero yo alucino. 

En cuanto a las leyendas, tras escribir varias y publicarlas en diferentes lugares, decidió recopilarlas en un único volumen, pero le sabía a poco y, otra vez, para conocerlas primero hay que conocer la historia que las conduce. Historia y leyenda se mezclaran de una forma increíble, os lo digo yo ;)

En fin, que sé que me voy por los cerros de Úbeda y ya va siendo hora de ir a buscar almas desorientadas. ¡Espero encontrarme con vosotros en vuestra próxima lectura!