Una chica. Carlota. Una casita rural en mitad del campo, alquilada para pasar la Navidad en familia, con vecina cotilla incluida. En el mismo lugar, un chico. Fran. ¿Destino o casualidad?
Se conocen en la época más bonita del año y no empiezan con buen pie. Parece que se odian, pero también se atraen irremediablemente…
Mucho chocolate con nubecitas al calor de la chimenea, galletas y dulces navideños, bolas de nieve, bragas de renos y lucecitas de colores… ¿Idílico, verdad?
Y mientras saltan chispas entre ellos, Fran tiene que tomar una decisión. Carlota no lo sabe. Él oculta algo que ella no se imagina… Lo que sí sabemos todos es que las mentiras tienen las patitas muy cortas… ¿Podrá la magia de esas fechas acercar a Carlota y a Fran? Puede que para arreglar los platos rotos necesiten, incluso, más de una Navidad…
Como lectora, ante todo, he querido crear una historia romántico-erótica con todos los ingredientes que para mí ha de tener un libro para poder disfrutarlo. Os invito a descubrirla y espero que la disfrutéis tanto como yo lo he hecho escribiéndola. Y por supuesto… ¡Ojalá siempre fuese Navidad!
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