Serie navideña:
Lo último que Micah Trant espera encontrarse sobre la nieve de la cuneta es a un hombre apaleado. Y cuando descubre su identidad, parece que hay algo más en juego que una mera coincidencia. Como buenos samaritanos del siglo veintiuno, él y su padre ofrecen al extraño un lugar para recuperarse. Después de todo, Acción de Gracias está a la vuelta de la esquina, y Greg no está en condiciones de volver a su hogar. Pero no es un acto enteramente altruista: Micah quiere respuestas. Y no es el único.
A Greg le cuesta creer cómo han acabado saliendo las cosas. La probabilidad de que Micah fuera el hombre que le encontrase debía ser astronómica, pero acepta la oferta amablemente. A medida que los días se van convirtiendo en semanas, Greg va aprendiendo más cosas sobre la familia de Micah, y empieza a darse cuenta de que pasar unas navidades en Wyoming con ellos puede que le proporcione las respuestas que ha estado buscando.
Joshua Trant se está esforzando al máximo por apoyar a su hijo Micah y a su pareja, Greg, a medida que va acercando el juicio contra los asaltantes de Greg. Nunca se supuso que fuera a ser un litigio sencillo, especialmente cuando Greg quiere que les procesen por un crimen de odio, pero el abogado del condado, Alexander Rycliffe, les garantiza que hará lo imposible para asegurarse de que los culpables rindan cuentas ante la justicia por sus actos. Joshua solo espera que, cualquiera que sea el desenlace, culmine con un Greg satisfecho con el resultado. Lo único que empieza a resultarle complicado es lidiar con los sentimientos que parece estar desarrollando hacia Alex. Joshua solo ha amado a dos personas en su vida —Hayden y Rachel—, y los perdió a ambos. La probabilidad de tener suerte una tercera vez es tan nimia, que la idea ni siquiera se le pasa por la cabeza, hasta que el amor —y sus hijos—, le dan un pequeño empujón en la dirección correcta.
Un hombre que piensa que ya tuvo su oportunidad de amar.
Un hombre que tiene que superar una traición pasada y aprender a confiar de nuevo.
Ambos están a punto de descubrir que la navidad es, en efecto, una época para los milagros. Lo único que tienes que hacer, es creer...
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