«No puedo dejarlo solo. Así no».
Mi nombre es Yves, y te voy a contar una historia.
El camino de un Templario es muy sencillo: Kaiden había nacido para ser un soldado, para combatir a los demonios y luchar contra el mal. ¿Pero qué pasa cuando empiezas a dudar de todo en lo que siempre has creído?
A la hora de la verdad, ¿qué elegirías: el Credo, o la vida de tu hermano?
«De eso trata tu historia: de cómo luchaste cada día, cada paso, por protegerlo».
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